¿Cuáles son los 3 tipos principales de riesgo en el trading?

Como dice el refrán, no hay recompensa sin riesgo. Como operador, su objetivo no debe ser eliminar el factor riesgo, sino mitigar sus efectos secundarios negativos y aprovechar sus aspectos positivos. A continuación, describimos los tres tipos principales de riesgos financieros a los que se enfrentará como operador y explicamos qué puede hacer con cada uno de ellos para minimizar sus efectos sobre sus posiciones.

Las tres principales categorías de riesgo comercial

1. Riesgo de mercado
2. Riesgo de liquidez
3. Riesgo sistémico

¿Qué es el riesgo de mercado? La posibilidad de que se produzcan cambios externos en todo el mercado

El riesgo de mercado es la posibilidad de que su posición sufra pérdidas debido a cambios en las condiciones generales del mercado, provocando que el precio de su activo subyacente se mueva en su contra de una forma que usted no había previsto.

Este tipo de riesgo también se conoce como riesgo sistemático (en otras palabras, lo contrario del riesgo no sistemático, que es un riesgo exclusivo de ese mercado concreto). Es algo distinto del riesgo sistémico, que trataremos más adelante.

Ejemplos de estas variables macroeconómicas cambiantes pueden ser la volatilidad del precio de la acción o del par de divisas con el que se especula, causada por noticias relacionadas u otro acontecimiento externo; o la incertidumbre repentina en el sentimiento del mercado, o un cambio en los tipos de interés o de cambio.

Por ejemplo, en febrero de 2023, JP Morgan predijo que, debido a que los tipos de interés se acercaban al final de su ciclo de endurecimiento, el par EUR/USD alcanzaría el 1,10 en marzo de 2023, antes de bajar al 1,08 en septiembre de 2023 y mantenerse en ese nivel hasta diciembre de 2023, ya que la Reserva Federal mantiene estables los tipos de interés.1

Por ejemplo, el Foro Económico Mundial mencionó el «aumento de la inflación» como riesgo predominante al que se enfrentan los sistemas financieros mundiales en 2023, lo que constituye un riesgo inflacionista.

Se trata de un riesgo inherente al que son susceptibles todos los mercados y al que se enfrentan todos los operadores cuando participan en los mercados financieros. El riesgo de mercado es un factor inherente que no puede eliminarse, ni tampoco debería desearse hacerlo. Sin las fluctuaciones de precios derivadas de los movimientos del mercado, los operadores tendrían pocas posibilidades de realizar actividades especulativas basadas en estos movimientos.

Cómo gestionar el riesgo de mercado (sistemático)

• Considere la posibilidad de establecer órdenes stop-loss, que pueden ayudarle a limitar las pérdidas potenciales cerrando automáticamente la operación si el precio de un valor alcanza un nivel predeterminado.
• Del mismo modo, considere la posibilidad de utilizar órdenes de recogida de beneficios para bloquear las ganancias cuando los mercados vayan a su favor. Estas órdenes cierran la operación por usted cuando se alcanza una cantidad predefinida de beneficios, evitando que los pierda si el mercado se vuelve en su contra.
• Pruebe la cobertura, que consiste en tomar posiciones compensatorias con otras operaciones en mercados diferentes y no correlacionados, para reducir el impacto de los movimientos adversos del mercado.
• Evalúe y analice periódicamente las condiciones del mercado, los indicadores económicos y cualquier factor que contribuya a la cotización del activo subyacente.
• Asegúrese de optimizar el tamaño de sus posiciones en función de su tolerancia al riesgo y de las condiciones del mercado, lo que puede ayudarle a gestionar mejor su exposición al riesgo de mercado.
• Manténgase informado sobre las noticias, tendencias y acontecimientos del mercado, lo que puede ayudar a los operadores a identificar posibles riesgos y a tomar las medidas adecuadas para gestionar su exposición.

Riesgo de liquidez: posibilidad de deslizamiento

La liquidez es una característica de los mercados, y viene determinada por la facilidad con la que el activo subyacente de ese mercado puede negociarse, o convertirse en efectivo, sin que ello afecte significativamente a su precio. Esto se debe a la cantidad de capital que entra y sale de un mercado. Cuántas compras, ventas y especulaciones en general se producen, con cuánto dinero, en un momento dado.

Puede haber mercados con «gran liquidez», en los que un gran número de operadores compran y venden constantemente grandes cantidades de dinero. También puede haber mercados «sin liquidez», en los que hay menos compradores y vendedores y/o se negocian cantidades reducidas de capital.

Cuando un mercado carece de liquidez, nos enfrentamos al riesgo de liquidez. Se trata de la posibilidad de que, debido a la escasa cantidad que circula en el sistema cuando usted abre una operación, su orden se ejecute a un precio distinto del que usted pidió. Debido a ello, el precio se ha desplazado ligeramente, o «deslizado», en el tiempo que tarda en ejecutarse y cumplimentarse su orden. El deslizamiento negativo se produce cuando el cliente recibe un precio peor que el solicitado.

Cómo gestionar el riesgo de liquidez

• Asegúrese de que opera en mercados conocidos por su gran liquidez, por ejemplo realizando cálculos para evaluar los ratios de liquidez. Estos mercados rara vez tendrán deslizamientos.
• Del mismo modo, elija mercados que históricamente hayan demostrado la capacidad de recuperación de la liquidez del mercado en épocas de tensión macroeconómica (si un mercado tiene poca liquidez, normalmente es menos capaz de hacer frente a perturbaciones imprevistas de forma rápida y sin problemas, que es lo que le causa el deslizamiento).
• Elija un bróker conocido por sus rápidos tiempos de ejecución.
• A veces, usted podría pensar que otra causa de «deslizamiento» en realidad podría ser una conectividad a Internet lenta o poco fiable por su parte, lo que provoca un retraso en su ordenador o dispositivo para poder realizar esa orden. Por lo tanto, asegúrese también de que opera con una conexión y un dispositivo rápidos y fiables.

Riesgo sistémico: posibilidad de quiebra del sistema financiero

El riesgo sistémico es la posibilidad de que importantes perturbaciones macroeconómicas y la vulnerabilidad interna provocan un colapso parcial o total de todo el mercado o sistema financiero. Es el más improbable de los tres tipos de riesgos potenciales, pero también la amenaza más grave.

La quiebra del Silicon Valley Bank y del Credit Suisse en marzo de 2023 son dos acontecimientos recientes importantes en el mercado que suscitaron preocupación por el riesgo sistémico en el sector de los servicios financieros. Ambos bancos tenían una larga historia en el sector, habían sobrevivido a la crisis financiera mundial de 2008 y se hundieron con pocas semanas de diferencia, aunque por motivos distintos.

Luego estaba la propia crisis financiera mundial de 2008, que acercó al mundo al colapso financiero sistémico más que ningún otro acontecimiento desde la Gran Depresión de principios del siglo XX. La bolsa, el mercado inmobiliario, las empresas de gestión de activos, las aseguradoras e incluso el sistema bancario estuvieron al borde del caos. Afortunadamente, de esta época surgieron una serie de reformas de la regulación financiera, con la esperanza de prevenir una amenaza similar de riesgo sistémico en el futuro.

Cómo gestionar el riesgo sistémico

La respuesta breve es que usted, como trader o inversor individual, no puede protegerse contra el riesgo sistémico (que, a escala macroeconómica, también puede denominarse «riesgo mundial», ya que afecta sistémicamente a todo el planeta).

Sin embargo, aunque no puede evitar que se produzca el riesgo sistémico, sí puede limitar su impacto sobre usted asegurándose de que nunca arriesga un capital que, en última instancia, no puede permitirse perder si el mercado se vuelve en su contra:

• Calcule cuidadosamente el tamaño de sus posiciones para asegurarse de que no está abriendo operaciones (especialmente cuando se trata de instrumentos financieros apalancados) que le supondrían una pérdida sustancial de la que tendría que recuperarse si el mercado cambiara desfavorablemente.
• Disponga en todo momento de un plan de gestión de riesgos bien pensado y sometido a pruebas de tensión, que pueda aplicarse a distintas clases de activos y escenarios, desde recesiones económicas hasta posibles incertidumbres sistémicas.
• Considere siempre la posibilidad de establecer órdenes stop-loss y órdenes take-profit que le ayuden a protegerse frente a pérdidas excesivas o le aseguren beneficios en objetivos predeterminados.
• Manténgase al día de las noticias macroeconómicas importantes de los mercados financieros, así como de los principales indicadores económicos, para saber a tiempo cuándo puede estar gestándose la incertidumbre en los mercados.

En conclusión: el resumen TL;DR

Asumir cierto nivel de riesgo es inevitable si quiere obtener beneficios especulando en los mercados financieros. Sin embargo, el hecho de que el riesgo sea un hecho en la vida del trader no significa que no pueda limitar los riesgos financieros a los que se expone y el nivel de pérdidas que suponen.

Hay tres categorías principales de riesgo a las que se expone todo operador: el riesgo de mercado, el riesgo de liquidez y el riesgo sistémico. Parafraseando la famosa oración de Alcohólicos Anónimos, hay algunos riesgos comerciales a los que puede cambiar su exposición, y otros a los que no. Se trata de tener la información necesaria sobre cada uno de ellos para saber la diferencia.

Fuentes:

¹ J.P. Morgan Chase, 2023